¿Qué es el efecto Streisand?
Algunas noticias se extienden como la pólvora, especialmente si son malas y, aún más, si se intentan ocultar o disimular. Este fenómeno, de hecho, tiene su propio nombre: el efecto Streisand, en honor a una famosa historia.
El origen del efecto Streisand
En 2003, un fotógrafo publicó miles de fotografías aéreas de la costa californiana en una web accesible al público general, con el objetivo de documentar la erosión de la costa. En una de esas fotos se veía la mansión en primera línea de playa de la cantante Barbra Streisand, que denunció al fotógrafo pidiendo una indemnización de 50 millones de dólares. La cantante no solo perdió el caso, sino que acabó haciendo famosa la foto en cuestión. Si hubiese decidido no poner la denuncia, la foto de su casa hubiese pasado prácticamente desapercibida: así fue bautizado el efecto Streisand.
La relevancia del efecto Streisand en los medios
Naturalmente, el hecho de que cierta información se vuelve más atractiva cuantos más esfuerzos se invierten en ocultarla ya era conocido antes del incidente con Streisand, especialmente en el ámbito de la psicología inversa. Sin embargo, a medida que el uso de Internet fue extendiéndose, el efecto también ganó relevancia: por un lado, cualquiera podía encargarse de diseminar información libremente en Internet y, por otro, las noticias llegaban mucho más rápido, ya fueran buenas o malas. En este sentido, gracias a Internet hemos visto desde vapuleos públicos en redes sociales hasta el surgimiento de plataformas como Wikileaks.
El efecto Streisand en marketing
Si tienes una empresa, aunque también como particular, el efecto Streisand puede dañar tu imagen si no reaccionas adecuadamente ante las críticas o intentas esconderlas. A veces basta con que se publique una queja en Facebook o Twitter o que se extienda cierta información confidencial, para que estalle un linchamiento digital o shitstorm.
Probablemente, la situación no hará más que empeorar si la empresa no toma en serio la crítica, la ignora o incluso elimina el comentario. Para evitar una ola de indignación o, al menos, para lidiar mejor con las críticas, pueden ser útiles las herramientas de gestión de crisis y de gestión de la reputación.
Ejemplos famosos del efecto Streisand
Lego y las piezas de la competencia en YouTube
En su canal, llamado Held der Steine (algo así como El héroe de los ladrillos), el youtuber alemán Thomas Panke hace reseñas de sets de bloques de construcción. Entre ellos, naturalmente, hay muchos artículos de Lego. En enero de 2021, la marca advirtió que Panke, por error, había llamado Lego a productos de la competencia y lo amenazó con tomar medidas legales si no borraba los vídeos afectados. Panke obedeció, pero a cambio publicó un vídeo mostrando la carta de Lego. Gracias al efecto Streisand, la famosa marca recibió muy mala publicidad, mientras que su competencia se benefició de ello.
El poema satírico del cómico Jan Böhmermann
El cómico alemán Jan Böhmermann llamó la atención de los medios en 2016 con un poema satírico sobre Erdogan. Poco antes, el presidente turco había logrado, a través del ministro alemán de asuntos exteriores, que un canal público borrase de su mediateca la canción Erdowie, Erdowo, Erdogan, que también lo ridiculiza. Con Böhmermann, Erdogan también consiguió lo que pedía: el 75 % del contenido del poema fue prohibido. Con lo que no contaba era que se publicase el poema entero como anexo a la sentencia, lo cual no hizo más que aumentar el interés del público por todo el asunto.
Nestlé y el aceite de palma
Ya han pasado algunos años desde que se desató el escándalo por el aceite de palma en el KitKat de Nestlé. En 2010, Greenpeace publicó un trágico vídeo en el que un hombre mordía el dedo de un orangután en lugar de la chocolatina. Con él, Greenpeace quería poner de manifiesto que la producción de aceite de palma destruye el hábitat de muchas especies. La publicación causó tanto revuelo en la cuenta de Facebook de KitKat que Nestlé acabó eliminándola, pero fue entonces cuando los verdaderos problemas empezaron: el efecto Streisand consiguió que cayera una shitstorm que sacudió toda la multinacional.