¿Cómo controlar el spam?

Se puede decir casi con absoluta seguridad que cualquiera ha tenido que vérselas alguna vez con el correo basura, que apareció en los años noventa como una nueva forma de publicidad y ya forma parte de la comunicación electrónica del día a día. Pero, ¿de qué se habla exactamente cuando se trata de spam y por qué se recibe? Y lo más importante, ¿cómo es posible deshacerse de tal molestia y evitarla de antemano?

¿Qué es el correo basura? Algunos conceptos básicos

Conocido también como “Junk E-Mail”, se entiende por spam o correo basura el envío indiscriminado de mensajes no deseados que llenan en masa los buzones de forma incesante. Este tipo de mensajes consiste principalmente en el llamado “unsolicited bulk e-mail” (UBE), como pueden ser las cadenas de correos y cartas, y en los mensajes comerciales no deseados o “unsolicited commercial e-mail” (UCE). En este tipo de correos se suele animar al receptor a comprar un determinado producto, a proporcionar datos personales con algún objetivo aparentemente lucrativo o a que abra un prometedor enlace a una página web o un archivo adjunto.

El origen del término se debe a la abreviación de la popular marca estadounidense de carne enlatada “Spiced ham”, que el grupo humorístico Monty Python utilizó para su llamado spam-sketh. En él la palabra “spam” aparece de forma tan frecuente que impide una comunicación normal. En este sentido, aplicado al correo electrónico, el spam constituye una forma de introducir contenido inútil en la comunicación electrónica.

Tipos de mensajes no deseados

Aunque no exclusivamente, el spam tiene lugar mayoritariamente a través del correo electrónico. Los spammers –individuos o empresas productoras de correo no deseado– usan este medio para distribuir publicidad sobre productos de dudosa calidad, notificaciones falsas, enlaces a páginas web con intenciones de phishing o de estafa y programas dañinos. Esto lo hacen mediante programas llamados spambots o Harvesters.

Las formas más habituales de correo basura se pueden clasificar en estos cuatro grupos:

  • Publicidad: a este grupo pertenecen, por ejemplo, todos aquellos mensajes no deseados con llamativas ofertas de objetos que son, en realidad, copias de artículos de lujo, de medicamentos sin licencia de venta, o con todo tipo de contenidos ilegales. En este grupo también se podrían incluir aquellos mensajes que ofrecen links a productos aparentemente gratuitos -que suelen derivar en suscripciones de pago-, o milagrosos modelos de negocio que generalmente enriquecen al spammer y no al revés, pues suelen invitar a la descarga de un software de pago.
  • Notificaciones falsas: Hay mensajes que consisten en llamamientos, avisos o historias de dudosa credibilidad: son los llamados “hoax E-Mail”. Estas historias, generalmente efectistas y engañosas (historias de virus especialmente infecciosos, de niños enfermos, etc.) apuntan directamente a las emociones del receptor, que inmediatamente reenvía el mensaje a todos sus contactos. Estos correos tienen un poder enorme de dispersión y se convierten en una eficaz manera de acumular direcciones de correo.
  • Phishing: Este tipo de correo no deseado imita los mensajes de una determinada empresa, generalmente un banco, para solicitar datos confidenciales tales como el número de cuenta, detalles de la tarjeta de crédito o las contraseñas. En este delito de suplantación de identidad, el correo suele dirigir al receptor hacia una página web falsa que aparenta ser la verdadera. Los datos que se introducen en esta página van a parar directamente a los ciberdelincuentes.
  • Programas dañinos: Virus, troyanos o spyware constituyen amenazas que pueden entrar en el sistema a través de mensajes no deseados o de remitente desconocido. Este tipo de software, también denominado malware, evilware o junkware de manera bastante gráfica, se suele esconder en programas, enlaces o archivos adjuntos que el receptor tiene que abrir, y que solo se puede eliminar mediante antivirus u otros programas especiales.

¿Por qué se reciben mensajes no deseados?

Muchos usuarios se preguntan por qué reciben tanto spam y en la mayoría de los casos es difícil evitarlo. Los llamados spambots o E-Mail-Harvesters son robots que recorren Internet sistemáticamente en busca de direcciones de correo electrónico que puedan ser usadas para el envío de correo basura. Solo hace falta que una determinada dirección sea hackeada para que la agenda completa de ese usuario pase a formar parte de una lista de correo basura.

Muchas veces se debe a una imprudencia del usuario el que la propia dirección sea captada por los spammers. Hay sorteos y concursos, por ejemplo, donde se autoriza al organizador, al aceptar las condiciones generales y los términos de uso, a usar las direcciones de correo con fines publicitarios. Muchos de ellos tienen el único objetivo de hacer acopio de gran cantidad de direcciones para el envío de correo basura. Mencionar la dirección de correo abiertamente en páginas webs, en redes sociales, en foros, en chats o en comentarios, son otras maneras de ponérselo fácil a los spambots.

¿Es posible protegerse del spam?

Es difícil evitar completamente el correo basura, dada la gran cantidad de spammers y robots que trabajan a diario para difundir sus mensajes. Pero sí existen ciertas medidas de prevención y algunos trucos con los cuales es posible disminuir la cantidad de intrusiones indeseadas en el correo. Se puede proteger la dirección de correo personal de diversas formas: proporcionándola solo cuando sea estrictamente necesario, no registrándola en concursos dudosos o en páginas desconocidas y utilizando eventualmente una segunda dirección de correo para asuntos menos importantes -que no se usará para nada más.

Es fundamental, por otro lado, evitar la publicación de la dirección principal en páginas webs. Cuando haya que hacerlo, cuide que sea en portales y comunidades protegidas. Una opción es nombrar la dirección de una forma alternativa, como puede ser “(at)” o “AT” en lugar de “@”, o “punto” o “point” en lugar del punto del dominio. Otra variante consiste en usar una imagen para mostrar la dirección de correo. Sin embargo, hay que ser consciente de que la seguridad absoluta no existe, pues hoy hay robots capaces incluso de detectar estas codificaciones y generar la dirección correcta.

Los filtros anti-spam

Los programas anti-spam se ocupan de detectar y seleccionar los mensajes no deseados y suelen ser proporcionados por los proveedores profesionales de correo electrónico y estar incluidos en cualquier programa de correo. Muchos de estos programas revisan automáticamente el contenido de los correos por medio del método llamado de la “lista negra”, la cual contiene palabras y expresiones típicas de los correos no deseados, pero no evita errores de selección. Hay otros métodos utilizados para reconocer el correo basura, pero ninguno de ellos garantiza cien por cien que sea reconocido siempre, o que mensajes autorizados no sean catalogados como spam. A pesar de los posibles errores, no es recomendable prescindir de un filtro anti-spam.

Consejo

Nuestro artículo sobre "El filtro de correo spam en Outlook" también podría interesarte.

Seleccionar y eliminar el correo basura manualmente

Si el spam no es filtrado correctamente entonces hay que intervenir, lo que requiere algún tipo de experiencia previa para reconocerlo. Muchas veces es el asunto el que delata a un mensaje no deseado al notificar ganancias extraordinarias, contenidos seductores o prometedoras oportunidades de ahorro. Si se detecta un correo de este tipo es necesario marcarlo como spam para que así el filtro “aprenda” a reconocerlo la próxima vez que aparezca. De ninguna manera hay que abrir enlaces o archivos adjuntos en correos sospechosos, pues tras remitentes desconocidos y asuntos curiosos suelen encontrarse contenidos basura.

A pesar de todas las precauciones, puede pasar que se abra contenido malicioso. En este caso solo un programa antivirus puede proteger el equipo. Este tipo de software ha sido diseñado para detectar virus, troyanos, gusanos -“worm” en inglés- y programas espía o “spyware”, que son bloqueados en cuanto intentan acceder al sistema. Y, a pesar de que estos programas solo pueden actuar contra las amenazas conocidas y por ello no pueden garantizar una protección absoluta de su equipo, es imprescindible contar con un programa antivirus que reduzca drásticamente el riesgo. Es crucial mantener el sistema operativo siempre actualizado para cubrir posibles brechas en la seguridad. Adicionalmente, no está de más efectuar backups o copias de seguridad de los datos más importantes y alojarlas en otro medio, de forma que se tenga siempre acceso a esta copia aunque el sistema resulte dañado.

Para protegerse lo mejor posible del correo basura, debería disponerse de un filtro anti-spam, un programa antivirus y realizar constantemente copias de seguridad. A nivel personal, la mejor protección es siempre la precaución, tanto al proporcionar la dirección de correo electrónico a terceros, como a la hora de abrir correos de dudosa procedencia.

IONOS Servicio de Validación

Comprueba la autenticidad de un correo IONOS, detecta aquí de inmediato si es una tentativa de phishing y denúncialo para borrar el contenido phishing.

  • Valida el correo electrónico
  • Fácil de usar
  • Elimina el correo phishing
¿Le ha resultado útil este artículo?
Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios y mostrarle publicidad relacionada con sus preferencias mediante el análisis de sus hábitos de navegación. Si continua navegando, consideramos que acepta su uso. Puede obtener más información, o bien conocer cómo cambiar la configuración de su navegador en nuestra. Política de Cookies.
Page top